sábado, 18 de agosto de 2007

EL INVISIBLE PÁJARO DE LOS ECOS



A Ángel Gavidia, para que sepa que no soy su amigo en vano.

Un gorrión solía cantar en un tuple. Un día llegó una bandada de pájaros y le dijo que su canto era feo, que mejor se callara.


— Tu canto suena como una rama quebrada. En tu garganta vive un ganso.


Así le dijeron con un torvo aire de inquisidores y se fueron volando.


El pobre gorrión entristeció. Desde entonces, la luna le parecía un ojo siniestro y el sol un girasol malvado. Pero como le era imposible dejar de cantar, se fue hasta una piedra grande, en las afueras del pueblo, y ahí, en un huequito que había debajo de ella, silbó. Silbó hasta quedarse extenuado.


Al día siguiente, en todo el pueblo se escuchó una hermosa mezcla de canto de pájaro y de piedra.


— ¿De quién será ese canto?


Así se preguntaban, aturdidos y alborotados, los enemigos del gorrión.


Otro día se oyó una mezcla de canto de pájaro y laguna; otro, de canto de pájaro y ribera y, en los otros que vinieron, el canto tenía el aire de los tabancos, de los cerros y hasta el silencio de las chozas solitarias.


— ¿Quién será?, ¿Quién será? — se intrigaban los inquisidores.


Uno de ellos, la oscura urraca, no soportó más y con tono solemne pronunció:


— Admitamos; el canto es bello.


— Sí, pero… ¿De quién se trata?


Como no lo sabían, decidieron llamarlo El Invisible Pájaro de los Ecos, pues eran ecos los que se oían y nada más. Mientras tanto el gorrión callaba sobre el tuple. Desde que lo habían conminado a no cantar, veíanlo silencioso, con las alas plegadas y el aire fúnebre.


Para compensarlo en algo, lo invitarían a participar en la construcción de un majestuoso templo en honor al Invisible Pájaro de los Ecos.


— No, no iré — dijo con voz cenicienta, pero firme, el gorrión.


— ¡Ateo!
— ¡Sacrílego!
— ¡Irreverente!


Todo esto le dijeron y se fueron volando.


Levantaron el templo en un quiñawiro altísimo, de grandes hojas verdes. Era realmente fastuoso. Ahí entonaban sus cantos y hacían sus zalemas. Por esos días los ecos eran más hermosos que nunca: canto de pájaro y rumor de sauce, canto de pájaro y flauta de pastor, canto de pájaro y olas de mar.


Los inquisidores llegaban al arrebato místico.

Pero una tarde, sin que nadie lo supiera, el gorrión murió. Y como los pájaros van a morir al cielo, al día siguiente el eco fue de pájaro y de cielo. Y como el cielo es limpio, el eco ya no era tal sino, nítido, el canto del gorrión. ¡Qué música, qué escarcha de viento y resplandor de manzanas!
Los pájaros inquisidores se miraron confundidos entre sí; al instante reconocieron la procedencia de ese canto y, avergonzados, se fueron volando al tuple.


Ni sombra del gorrión. Sólo el vaho de la muerte.

— Era él — graznó la cacatúa.

11 comentarios:

Garo dijo...

Excelente Don Alberto, me gustó el tema; y la forma del lenguaje. Sin embargo lo sentí predecible en cuanto al manejo del argumento. Pero en verdad es una bonita, en mi opinión, fábula. Saludos

Anónimo dijo...

HOLA, ALARKON:
ESTE KUENTO LO LEI KUANDO TU HIJO, OSKAR, EN UN AKTO DE AMISTAD ME ENTREGO UNA ESPECIE DE PLAKETA O FOLLETO VERDE EN HOMENAJE A VUESTRA PERSONA...
EN EL KAMINO LO LEI DE UN TIRON , ME GUSTO.
LUEGO LO LEI EN TU REVISTA "LA MOSKA INGRAVIDA" ME PARECIO MAS INTERESANTE, KON ALGUNOS ARREGLOS.
AHORA, LO LEO OTRA VEZ E IGUAL MANTIENE LA KALIDAD.
ME PARECE KE LE HAS AGREGADO ALGO MISTIKO, KE NO ESTA NADA MAL.

KADA SER TENEMOS UNA VOZ PROPIA, Y DEBEMOS MANTENER SU AUTENTICIDAD E INDIVIDUALIDAD.
SALUDOS.

Anónimo dijo...

HOLA, ALARKON:
NO TE SAKARE RONCHA, PERO, TAL VEZ TE ESCARIFIKE KON UNAS KUANTAS LINEAS //// ZAZ!!!
PERSONALMENTE NO ME GUSTA LA ONDA MISTIKA, NI MELA, KREO KE SE ENTIENDE POR MI POSTURA O INDIFERENCIA HACIA ESOS TEMAS...
POR ESO, PREFIERO EL KUENTO EN SU ANTERIOR VERSION...
REGRESA AMADA POESIIIAAAAA!!!
ESPERO HABER SACIADO TU IMPETU DE VOLUNTARIO MASOKISTA...


NO ME DEJES SOMBRA DORADAAAAA!!!

SALUDOS...

Anónimo dijo...

SIGUIENDO LA RIGUROSIDAD DEL LENGUAJE, DEBI DECIR:
NO TE SAKARE RONCHA PERO, TAL, VEZ TE ESCARIFIKE KON UNAS KUANTAS LINEAS...
SALUDOSSSSSSSSSS

Anónimo dijo...

Y OTRA VEZ , DEBI DECIR:
NO TE SAKARE RONCHA PERO, TAL VEZ, TE ESCARIFIKE KON UNAS KUANTAS LINEAS...
HORA SI LO DEJO TAL KUAL...
SALUDOSSSSSSS

L. M. Armas dijo...

jajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajaja.

Anónimo dijo...

Al igual que Toscano, yo ya he leído este cuento. Me parece bueno en el sentido del lenguaje que en él maneja señor Alarcòn. Sin embargo permítame, por una vez, pornerme en su lugar de corrector de textos: cuando uno usa la "raya" en los diálogos o intervenciones de personajes, ésta va pegada a la primera letra de dicha intervención; y si hay acotación del narrador, la raya va pegada a la primera letra de dicha intervención. En su texto veo que esas reglas no se cumplen.

Saludos.

Anónimo dijo...

Un ejemplo de lo anteriomente dicho es esta línea de su cuento:

— ¿Quién será?, ¿Quién será? — se intrigaban los inquisidores.

Cuando debería ser así:

—¿Quién será?, ¿quién será? —se intrigaban los inquisidores.

Ah, y también la segunda palabra "quién" no debe ir con mayúscula, ya que no hay punto que la preceda (por eso la cambié a minúscula en el ejemplo).

Saludos. Espero no le moleste estas cosas.

Anónimo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
L. M. Armas dijo...

jajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajaja.

CÉSAR CASTILLO GARCÍA dijo...

este es uno de tus mejores textos... me gusta este tipo de relatos... lo tuyo es la fábula, definitivamente